vendredi 14 mai 2021

Joan Margarit

Foto de Alex Rademakers
Nació en Sanahuja en la provincia de Lérida  en 1938 y falleció en 2021 era poeta y arquitecto era su profesión, catedrático de Cálculo y Estructuras de la Escuela Superior de Arquitectura de Barcelona.

Como poeta, se dio a conocer escribiendo primero en castellano en 1963. Con la publicación de Crónica en 1980, inicía asimismo su andadura como poeta en lengua catalana.

En 1954 va a Santa Cruz de Tenerife y descubrió la poesía, de la mano de un profesor de instituto llamado Pablo Pou que le dio a leer Antonio Machado.  Así las cosas, Tenerife se convertiría para siempre en "La isla del tesoro". Un lugar y un tiempo que nunca iba a olvidar, esta plasmado en su libro "Un asombroso invierno (2017) empieza con un poema con el mismo título:

 Un invierno fascinante

Pronto no habrá amapolas.

Eliminadas como malas hierbas,

van desapareciendo de los campos.

Ya no se extenderán las rojas pinceladas del viento en los trigales.

¿Quién entenderá, entonces,

los cuadros de Van Gogh?

Todavía es un mundo familiar, aunque

cambios sutiles ya me alertan:

no volverá jamás a ser el mío.

No es ningún infierno: permite comprender.

Llega el olvido, tranquilizador.

Y vuelve, siempre vuelve, la alegría.

En 1970 abre despacho de arquitectura propio junto a su colega el arquitecto Carles Buxadé y desde el 

2004 funda el estudio 2BMFG Arquitectes con Carles Buxadé, Ágata Buxadé y Ramon Ferrando. 

Durante años formó parte del equipo que dirigió las obras de la Sagrada Familia de Barcelona y en su 

currículum también figuran los proyectos del Estadio y Anillo Olímpico de Montjuïc (1989) realizado 

junto a Fernando Correa, Alfonso Milà y Vittorio Gregotti, la reforma del Monumento a Cristóbal 

Colón de Barcelona (1982-1984) o la cúpula del Pabellón Fernando Buesa de Vitoria-Gasteiz, la más 

grande instalada en Europa con más de 80 metros de diámetro.

José Antonio Coderch su profesor de arquitectura  le decía:  "Una casa no debe ser ni independiente, ni 

hecha en vano, ni original, ni suntuosa". Siempre Margarit pensó lo mismo de la poesía.  

El poeta  mencionó en algunas oportunidades lo siguiente:


“La poesía es muy vecina de la música. Cuando un poeta hace un poema está haciendo una partitura que mandará a un lector que no conoce y ese lector cogerá ese partitura y en su instrumento interior la interpretará”.

En su poema Sonata, uno de los que le hacía sentir más orgulloso, describe su relación con la música:

La escucho y cae la lluvia

y pienso en aquel perro solitario

que iba detrás del ataúd de Mozart.                                                               

Lo sigo en los compases de este piano

y en los caminos que dibuja el agua

al irse deslizando en los cristales.                                            

Voy, misteriosamente feliz, siguiendo a un perro

hecho a la vez de música y de lluvia.

“Gracias al General Franco, mi castellano no tiene problemas; es lo único bueno que me dejó aquel hombre y por lo tanto no voy a cederlo. El poeta debe escribir en su lengua materna. Inmediatamente que empiezo mi primer esbozo en la lengua materna, en catalán; yo tengo mi segunda lengua el castellano junto a mí. Dado que no se va a quejar nadie que haga modificaciones del castellano al catalán o viceversa. Pues, soy el amo y señor de mis poemas. Son versiones en cada mundo de los dos idiomas”.

Escribe una obra muy clara  y con emoción, llega al lector, quien fácilmente se identifica con el entramado de vivencias y sentimientos que el poeta destila con esa entonación serena y transparente que le distingue. La cultura está unida a la vida.

El mejor libro para entrar al mundo de Margarit es "Aguafuertes" (1995) , contiene su pasado como hijo, su vida en Barcelona y su familia.

Otro de que se puede recomendar es "Estación Francia" (1999) versión bilingüe. Contine uno de los poemas más largos  del escritor: Filósofo en la noche, es una especie de monólogo interior en boca del filósofo Emilio  Lledó que recuerda como ha sido su vida mientras va leyendo "La Ilíada" de Homero.

La obra "Joana"(2002) es  un libro vivido y sentido palabra a palabra y con la intensidad con que un poeta quiere dejar constancia, gracias a su arte, de un periodo y de unas vivencias que le han marcado de manera indeleble, la enfermedad y el fallecimiento de  su hija.

También contó que  había encontrado cierta serenidad en la música clásica, de la que era un apasionado desde el día en que su padre se plantó en casa con un tocadiscos (corría el año 1957 o quizá 1958). Una serenidad que se volvió incluso consuelo si se trataba de Schubert.


LOS OJOS DEL RETROVISOR

Los dos, Joana, nos acostumbramos

a que esta lentitud para bajar 

del coche con muletas, desafíe

los abstractos insultos de los cláxones.

Tu compañía es mi serenidad: 

la sonrisa de un cuerpo tan lejano

de lo que siempre se llamó belleza, 

la penosa belleza, tan distante.

Elegí en su lugar la seducción

de la ternura iluminando el hueco

 

que la razón dejó en tu cara.

 

Cuando me miro en el retrovisor

veo unos ojos que no he visto nunca,

pues brilla en ellos el amor que dejan

tantas miradas, y la luz, la sombra

de lo que he visto y la paz que trae

tu lentitud, que está dentro de mí.

 

Tan grande es la riqueza

 

que no parecen míos los ojos del espejo.

 

 El poeta recita la versión en catalán "Ell ulls del retrovisor"


El cantante  Xavier Ribalta cantautor catalán da voz y  música a los poemas de 

Margarit


En el programa Página Dos hablarán de su libro "Para tener casa hay que ganar la guerra". Para el escritor, la cultura es "el mejor consuelo para el ser humano". (Para ver la entrevista avanzar el cursor hasta 6:45-11:28 /  15:23 (Casa Vicens) / 21:08-27:00.

En el programa La Aventura del Saber  nos presenta la antología "Todos los poema" (1975-2015). El escritor nos dice que "Gracias al General Franco su castellano no tiene problemas; es lo único bueno que le dejó aquel hombre y por lo tanto no va a cederlo.

En su  Página oficial podemos escuchar a Joan Margarit recitar sus poemas.

En el programa Las mañanas de RNE con Pepa Fernández   fue entrevistado para hablar de su libro  "Hay que llegar leído a la emoción" Es coautor junto con la pintora portuguesa Paula Rego.   

Se recuerda al poeta, amigo del programa Las mañanas del RNE. Autor de más de una treintena de poemarios en catalán y castellano, fue galardonado con varios premios como el Nacional de Poesía, el Nacional de Literatura de la Generalitat, el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana o el Premio Cervantes.

El cantante Miguel Poveda le rinde también homenaje con su voz al poeta y al legado que dejó.