Es una casa de marinero llena de recuerdos, replica de
veleros, mascarones de proa, barcos entro de botellas, caracolas marinas,
etc...
En la casa, Pablo Neruda escribió parte importante de su obra literaria, reunió allí la mayoría de sus libros y también ejerció la hospitalidad que es un legado de su infancia.
El golpe de estado, el 18 de septiembre de 1973
llegaron algunas amigos hasta allí. Pero solo traían noticias alarmantes. Al día siguiente el poeta, gravemente enfermo,
fue llevado a la capital, después de cuatro días falleció. Solo volverá a su amada Isla Negra en diciembre de
1992, cuando sus restos fueron traslados.
Se cumplió así la voluntad que Neruda había expresado hacía casi cincuenta años en su poema “Disposiciones “de Canto general.
“Compañeros, enterradme en Isla Negra
Frente al mar que conozco, a cada área
rugosa de piedras
y de olas que mis ojos perdidos, no
volverán a ver…
Dan y Bruno
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